Otoño

Siento que la vida se apaga, se cae hoja a hoja cuando el otoño llega y sin más remedio, todo aquello que floreció tiene que dar paso a la melancolía y tristeza. Es una escena triste, donde las sonrisas se apagan, donde los buenos deseos se esconden tras los abrigos del pasado y dejas que el silencio te abrace, de tal manera que no puedas apreciar todo aquello que tienes a tu alrededor, dejas de pensar en el mañana y te quedas en el pasado, pensando que es lo mejor, para no darte cuenta que te estas marchitando en otoño.

Deshojando los muchos sueños que tuve en otoño, me indica que debo cambiar de rumbo, dejarme arrancar por los vientos del sur para ser llevado al norte, donde seguramente reposare, con la esperanza de poder volver a germinar, el camino será sin duda duro, quizás quede abatido en el intento, pero tomare la altura necesaria, me dejare llevar sin poner resistencia, mientras dure llegar a ti, me refugiare en tu anhelo. Si demoro, tenme paciencia y si no puedes, comprenderé. Pero, me sentiré dichoso, de haber podido iniciar esta aventura de amor.

Si, después, de este otoño que arranca mis sueños, llega el invierno como última prueba para poder llegar, no tendré frío y no me dejare atemorizar, seré fuerte y el anhelo de germinar nuevamente me tendrá vivo. Pero sin duda todo tiene una razón, espero que llegue a ti en el momento preciso.